Recientemente descubrí una pajita que reduce el uso de plástico. Esto, en parte, salva los océanos. Lo he probado y aquí está mi opinión:
¿Qué es FinalStraw?
Todo comenzó con Emma Rose Cohen. Es una apasionada del medio ambiente y actúa para su protección. Tiene una maestría en gestión ambiental y desarrollo sostenible. Durante estos estudios, ella y sus amigos lanzaron un programa de educación ambiental para concientizar a los niños sobre los efectos dañinos de los plásticos de un solo uso. En 2017, Emma Cohen comenzó a trabajar en un proyecto, FinalStraw, con la esperanza de crear una alternativa sostenible a las pajillas de plástico desechables. En abril de 2018 se inicia la financiación de su proyecto Kickstarter. Es un éxito se recaudan 1,89 millones de dólares.
El equipo de FinalStraw está formado por 5 personas a tiempo completo. A esto hay que añadir los 13 trabajadores autónomos. 18 miembros componen el equipo.
FinalStraw es una pajita de acero inoxidable, reutilizable, sólo tienes que lavarla. Desde su creación, más de 300.000 de estas pajillas se han vendido en más de 100 países. Esto impidió la utilización de aproximadamente 27 millones de pajuelas de un solo uso. En su sitioes posible ordenar su paja. Por 24,50$, o alrededor de 22,20 €, el paquete incluye: una pajita plegable, un cepillo pequeño para limpiarlo y una pequeña caja para guardar todo. La caja está disponible en 5 colores y la paja en 2: gris o arcoíris. Es posible obtener un descuento de 10% suscribiéndose a su boletín informativo.
Estas pajillas tienen varias ventajas: al ser plegables, son prácticas y fáciles de transportar. Un anillo en la caja permite colgarlo de un llavero. Además, lo más importante es que reduce el uso del plástico.
Prueba la paja FinalStraw
Primera reacción al recibir la paja, la caja es realmente pequeña, no ocupa ningún espacio (un poco menos de 7 cm de alto, para unos 2,5 cm de ancho y profundidad). Cuando abra la caja, encontrará la pajita doblada en cuatro y el pequeño cepillo guardado.
Sólo saca la pajita, y se despliega por sí misma. Una vez desplegada, la paja mide unos 22 cm de largo. Consta de 4 tubos de acero inoxidable y un tubo de silicona que pasa a través de los tubos de acero. El cepillo para limpiarlo también está bien hecho, almacenado tiene sólo 6 cm de largo, está compuesto por tubos que encajan entre sí. Una vez desplegada, mide 14,5 cm. Para limpiar la paja, por lo tanto, es necesario ir de un lado a otro.
El uso es muy sencillo. Despliegue la pajita, úsela y límpiela. La experiencia de beber es similar a la de una pajita normal. El único punto que cambia es que las puntas están hechas de silicona, lo que puede ser perturbador al principio en términos de sensación en la boca. Al final de su uso, lo único que queda es lavarlo, lo que resulta sencillo y rápido con el pincel.
Conclusión
Personalmente, valido esta pajita. Su pequeño tamaño lo hace portátil en todas partes. La larga vida útil teórica de la paja compensa su precio relativamente alto. Además, se consigue un ahorro real en plástico bebiendo con FinalStraw, se consigue una buena acción para el medio ambiente. También es importante tener en cuenta que sólo se puede comprar una pajita o un cepillo de limpieza.
Después, será necesario ver a tiempo si la paja realmente dura.
D’autres pailles pliables se vendent moins chères sur des sites tels qu’Amazon ou Cdiscount mais ce sont des contrefaçons, donc c’est illégal. De plus, leur qualité peut être médiocre. FinalStraw lutte contre ces contrefaçons et à ce jour, en a fait retirer plus de 20 000 grâce à une équipe dédiée à cette cause. Pour agir contre cette fraude, 3 entrepreneurs sont engagés.
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